lunes

Sobre la música descansó la belleza

Acabo de terminar de leer un libro sobre la música como discurso sonoro y pasa que no tengo ni idea de nada y soy tremendamente feliz y soy angustia por la falta de tiempo que la ignorancia descubre.

Yo soy íntima de la música pero no recuerdo cómo. No creo que nadie guarde ese recuerdo aunque debió de ser mágico en cada una de las ocasiones. La primera vez que siendo niño tu tímpano vibra al recibir las ondas que provienen de la pared que rebota el sonido que sale de un bafle que vibra lo que una aguja apoyada en un disco de plástico rugoso recordó que alguna vez fue la filarmónica de Berlín tocando en los estudios de la Jesus-Christus-Kirche construida en 1930 por Jürgen Bachmann en el barrio de Dahlem, Berlín (Alemania). A su vez, ellos graban algo que otro señor siglos antes, en un mundo anterior, con gente anterior ideó y plasmó, interpretó. Algo que ese Joseph o Wolfgang quiso transmitir. Hay muchas capas superpuestas en la música, muchas lecturas sucesivas, muchas claves. Hay sonidos, símbolos, metáforas, armonías, figuras, efectos, líneas, dinámicas, piezas, ritmos, pasajes, ...El oído es su mayor seguidor pero el gran intérprete es el cerebro humano.

En este libro que leí habla del periodo presente como el único en la historia en que se representa música de siglos anteriores. Habla del historicismo mal entendido, de las aberraciones en pos de la fidelidad, de perderle el miedo a lo antiguo y respetarlo como un ser vivo, porque no puedo imaginar algo más vivo que la música. La música es instantánea y fugaz como los momentos sucesivos en que tu emoción la recorre.
Habla del cambio que supuso la revolución francesa y con ella los conservatorios de música. Las reglas y las pautas. Las transcripciones.
Habla brevemente del alumbramiento de la ópera. De la pugna entre italianos y franceses. De Lully y de Romeau. De Purcell y la sobriedad inglesa. De la danza, de las danzas populares, del nacimiento de la suite, de la transición al clasicismo, de la pobre viola de gamba y su guapo hermano pequeño el violín. De la trompa, del bajo continuo y de las primeras polifonías, de doblar voces, de los tipos de canto y los recitativos.
No recuerdo casi nada; pasé por las letras de descubrimiento en descubrimiento deborando hoja a hoja pero apenas recuerdo uno o dos detalles. Solo sé que el pozo se ha hecho más hondo, la admiración ha crecido y se ha ensanchado la lágrima de la emoción.

Hace unos días veía una película en la que una de las protagonistas hablaba del vino como un ser vivo que seguía vivo en la botella. (En alguna de las reflexiones del libro me vino a la mente esta película). Una botella que hablaba de la gente que vivía en una tierra y cultivaba la vid, la recogía en un año en un mes en un momento en que sucedían cosas en que hacía un tiempo determinado con la gente en cierto estado de ánimo. Luego se trabajaba y se embotellaba y ahí seguía viva, madurando todo aquel instante, haciéndolo perdurar como tal y a la vez dejándolo evolucionar y mutar a través del tiempo.

Algo me pasa con la música. La entiendo mucho y me es totalmente ajena al mismo tiempo. Sé discernir cuál de las interpretaciones de una misma pieza es mi preferida, la que más me perturba y sé decir el porqué pero no sé decir cómo lo sé. Consigo separar uno o dos , a veces más, instrumentos en una canción y seguirlos a través de la música. Desde que recuerdo, canto vocecillas mientras canta la voz principal de esas horteradas que en el fondo me gustan de DIVAS de los noventa y señoras respetables del jazz de antaño. Y sigo pensando, secretamente, como lo pensaba hace unos años que esa forma negligente de amor, amor en estado de desconocimiento, amor mágico, platónico, es el más bello y a la vez el más vacío de los amores. Y tengo miedo. Tengo enormes ganas e igual de enormes miedos pues enormes son los pasos que me quedan por profundizar para intentar abarcar y conocer lo suficiente la ubérrima existencia de ese instante embotellado que es la brizna musical.


el gran tute

el gran tute
y la vida al desnudo