Te escribo una carta.
Una y otra vez.
Escribo desde la comisura todo
eso que nadie nunca leerá sobre mí,
los sentimientos velados, las
expectativas que tuve
pasajera de mis sueños, desnuda
e informe.
Escribo una carta para dejar
encerrado en un sobre
un amor que viaje como querría
que viajáramos.
Te escribo que eres importante
te escribo que ya sé que no
estaremos juntos
siento leer las letras
anteriores
pero he comprendido ya que tú
no estás ahí
donde yo te he querido tantas
veces.
Tú estás, pasajero de tus
sueños.
Un bote sumergido y yo,
sin aire suficientemente.